miércoles, 24 de noviembre de 2010

REFLEXIONES VARIAS II

Hoy me puse a pensar la importancia que no le damos a la vida, cuando ésta sin querer nos quita cosas, pensamos que es injusta y olvidamos que sin ella no seríamos quienes somos.
Todos estamos llenos de momentos felices y nos sentimos morir cuando algo se termina.
La felicidad llega en cualquier momento, todo en el mundo se termina, hasta lo más hermoso, hasta lo más molesto y doloroso.

A veces nosotros pensamos que estar solos es el fin de la vida y no nos damos cuenta que a veces la soledad nos ayuda a encontrar respuestas que no estaban. ¿Por qué cuantas veces estamos acompañados de mucha gente y en realidad nos sentimos solos?. El amor tiene un millón de vueltas, a veces nos sorprende y nos da felicidad y a veces se transforma en lo peor que hay y nos da el peor de los sufrimientos.

Pensando todo esto , crecí un poquito mas, aprendí a sonreír un poco mas y a ver la realidad tal cual como es, pero sobre todo pude darme cuenta que no sirve de nada el ORGULLO cuando existe la AMISTAD y el AMOR, que no sirve LLORAR cuando un amor se va, que no vale la pena aprender a CALLAR y que si sientes algo por alguien..... díselo, no te calles, pero díselo hoy,
porque mañana puede ser demasiado tarde, y que no existen FRONTERAS cuando nos sentimos vivos y que la DISTANCIA no es importante cuando existe AMOR verdadero y que si de verdad queremos algo o a alguien debemos LUCHAR por conseguirlo y nunca rendirnos.

También me di cuenta de que deberíamos hacer mas caso a nuestro CORAZON, a nuestra voz interior y no hacer caso a lo que digan los demás. Nos pasamos media vida haciendo cosas con las que no estamos de acuerdo, a veces pensando mas en los demás
que en nosotros mismos.
Y esta bien pensar en el bienestar de los demás, pero ............ ¿que pasa con lo que verdaderamente queremos nosotros?.

viernes, 12 de noviembre de 2010

(...)


¿Nunca has tenido esa sensación de querer dejarlo todo como está? ¿De hacer que nada cambie?, ¿Qué todo siga igual que hasta ahora?
¿Nunca has tenido esa sensación de querer cambiarlo todo? ¿De hacer que todo tome un nuevo rumbo, que nada siga como lo está haciendo?.

Son sensaciones tan opuestas y a su vez tan relacionadas; interconectadas de tal forma que se pasa de una a otra en una fracción de segundo.

Hay momentos en los que pararías el tiempo, permanecerías en ese preciso instante toda una eternidad, sin miedo a cansarte ni aburrirte. Perpetuar ese instante mas allá de lo que puedas llegar a imaginar, vivirlo y revivirlo tantas veces como desees. Es en esos momentos en los que todo debería seguir tal cual.

Pero a veces la vida nos pone trabas, pequeñas dificultades que en ciertas ocasiones podemos salvar y en otras no. Si ya el hecho de no poder superar esa traba nos resulta desagradable, aun hay que sumarle el sentimiento de impotencia cuando es algo que no depende de nosotros mismos.

Hay obstáculos que uno consigue vislumbrar en el horizonte, que lo ve venir y hace lo imposible por intentar burlarlo. Si ese obstáculo nos va a hacer cambiar algo que en ese momento queremos que permanezca intacto aún ponemos más de nuestra parte para que no llegue. Es aquí donde formulo otra pregunta retórica: ¿Qué se siente cuando uno ha hecho todo lo que ha estado en su mano y no ha conseguido solventar el problema porque no dependía de él? La respuesta es bien sencilla, como bien he dicho antes, “impotencia”.

Todos hemos sentido esa desagradable sensación en nuestras propias carnes, pues bien, yo no iba a ser menos. Luchar y luchar por mantener lo que quieres. Se acerca una valla, pero la consigues saltar; se aproxima otra más alta, pero también consigues saltarla; hasta que finalmente viene hacia ti una pared. Te armas de valor, no te rindes e intentas chocar de frente contra ésta. Una simple palabra, un mero gesto, hasta la más imperceptible de las sonrisas te da más fuerzas de las que ya posees y crees que puedes derribarla.
Finalmente la pared te alcanza, cae sobre ti y te aplasta contra el suelo. Ahora querrías cambiarlo todo, hacer que la pared no te hubiera aplastado.

Pues bien, aquí estoy, aplastada por una pared.

lunes, 8 de noviembre de 2010

QUIERO...


Quiero que aprendas a llorar y aprendiendo a llorar descubras lo valioso de una sonrisa dada con el corazón y la fuerza que la misma puede darte para continuar.

Quiero que pases por una decepción y que a través de ella aprendas que las personas por mucho que ames no son perfectas, sino que siguen siendo humanas y cometen errores, que pueden llegar a herir gravemente, pero que a pesar de eso tendrás que saber perdonarlas, porque si no lo haces el único que pierde es tu corazón al albergar un rencor y un dolor que nunca mereció.

Quiero que ames intensamente una y otra vez sin prejuicios, sin miedos y sin desconfianza, pues no todas las personas son iguales y así como tú mereces mil oportunidades, también los demás la merecen. Quiero que aprendas a crecer sin endurecer tu corazón y que descubras que por sobre todas las cosas lo más importante siempre es el amor.

viernes, 5 de noviembre de 2010

NO ME GUSTAN LAS PRINCESAS


Siempre me han dicho que las princesas no lloran, que nunca están mal. Que jamas dejan de sonreír, que no tienen miedo a nada, que son valientes. Que pueden conseguir lo que quieran. Siempre me han dicho que yo era una pequeña princesa pero... no lo soy.
No lo soy porque yo si que lloro y también estoy mal. No sonrío siempre y tengo miedo a muchas cosas. Jamas me gustaron las princesas, desde niña las he odiado. Quizás sea porque ellas representan todo lo que yo no soy y todo lo que la gente ve bien. Suelo llevar la contraria al mundo entero. 
Lo sé, puede que sea la chica mas complicada que exista en el mundo. No lo puedo negar, pero... jamas en mi vida he intentado ser algo que no soy. No soy una princesa y no quiero serlo. No espero que todo me salga bien, no creo en los príncipes azules que son capaces de cambiarte la vida en un abrir y cerrar de ojos. Solo conozco sapos y ranas que siempre terminan haciéndome daño. No creo en palacios de cristal ni en besos de ensueño, no creo en nada porque todo es irreal. 
Ahí fuera las cosas no son como parecen. Hay personas increíbles y otras que es mejor tener lejos. Hay momentos inolvidables y otros que desearías borrar de tu mente. No existe un equilibro entre el bien y el mal. Los malos siempre ganan y los buenos pierden.


**Ido**

jueves, 4 de noviembre de 2010

CERRAR ETAPAS


Siempre es preciso saber cuándo se acaba una etapa de la vida

Si insistes en permanecer en ella, más allá del tiempo necesario, pierdes la alegría y el sentido del resto.

Cerrando círculos, o cerrando puertas, o cerrando capítulos. Como quieras llamarlo, lo importante es poder cerrarlos, dejar ir momentos de la vida que se van clausurando

¿Terminó con su trabajo?, ¿Se acabó la relación?, ¿Ya no vive más en esa casa?, ¿Debe irse de viaje?, ¿La amistad se acabó?

¿Ya no eres un niño?

Puede pasarse algún tiempo de su presente "repasando" los “porqués”, rebobinando el casette para tratar de entender por qué sucedió tal o cual hecho.

El desgaste sería infinito porque en la vida, usted, yo, su amigo, sus hijos, sus hermanas, todos y todas, estamos abocados a ir cerrando capítulos, a pasar la hoja, a terminar con etapas o con momentos de la vida y seguir adelante.

No podemos estar en el presente añorando el pasado.

Ni siquiera preguntándonos por qué. Lo que sucedió, sucedió, y hay que soltar, hay que desprenderse.

No podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con quien no quiere estar vinculado a nosotros.

No ¡Los hechos pasan y hay que dejarlos ir! Por eso a veces es tan importante destruir recuerdos, regalar pertenencias cambiar de casa, tirar documentos, vender o regalar tus libros. Los cambios externos pueden simbolizar procesos interiores de superación.

Dejar ir, soltar, desprenderse.

En la vida nadie juega con las cartas marcadas, y hay que aprender a perder y a ganar. Hay que dejar ir, hay que pasar la hoja, hay que vivir con sólo lo que tenemos en el presente! El pasado ya pasó.

Por eso .... cierre, clausure, limpie, tire, oxigene, despréndase, sacuda, suelte.

Hay tantas palabras para expresar esa salud esencial

Y cualquiera que sea la que escoja,

le ayudará definitivamente a seguir

para adelante con confianza.

¡Esa es la vida!

Paulo Coelho.

lunes, 1 de noviembre de 2010

REFLEXIONES VARIAS


Nos conformamos en vez de arriesgarnos, sin pensar que cada día que pasa, no volverá.

Nada está escrito, nada es imposible, ni siquiera posible... todo depende de nuestra voluntad, de esas fuerzas que nos salen de adentro, decir de adentro es decir que puedo afrontar cada desafío.

Tenemos el poder cuando estamos convencidos, cuando estamos decididos, cuando de verdad queremos algo.

No hay obstáculo capaz de imponerse, si queremos podemos llegar más lejos, si queremos podemos llegar más alto, si queremos podemos hacer lo que sea... "sólo hay que proponérselo"...

La vida es algo hermoso, siempre y cuando la hagas a tu manera, sin dejar que nada ni nadie opine por ti, que se meta en tus asuntos queriendo arreglarlos.

Nunca dejes que nadie te arruine la vida.

La vida es una sola, vívela paso a paso y no dejes de hacer nada, probablemente te arrepientas y cuando te des cuenta será demasiado tarde.

Tampoco dejes de vivir los sueños y las ilusiones, sin ellos , la vida no tiene sentido.

Trata de ir siempre de frente, sin vueltas...

No confíes en toda la gente que te rodea, a veces piensas que es la mejor persona del mundo, y en realidad es un verdadero enemigo.

Anda siempre con la verdad, por más dolorosa que sea, de todas formas vale mucho más que una mentira.

Si algún día te sientes solo, y tienes ganas de llorar, hazlo, muchas veces ayuda a que te desahogues.

Ante cualquier problema; no huyas por miedo a enfrentarlo, y nunca olvides esto:
LUCHA COMO SI FUERAS A VIVIR SIEMPRE
Y VIVE COMO SI FUERAS A MORIR MAÑANA!